Cuando tenía el herbolario, todos los miércoles hacía un taller de remedios naturales con Plantas y otras cosas y obviamente todos esos remedios los buscaba en libros, en Internet…, los ponía en práctica y luego se los enseñaba mis alumnos y poco a poco empecé a crear mis propios remedios. Dentro del mundo de las plantas lo que más me gusta son los remedios porque son sencillos, fáciles de aplicar, eficaces y realmente te mejoran la vida y la economía. 

Uno de los  remedios que más me ha alucinado te lo voy a enseñar ahora mismo y es el desodorante más eficaz que yo he probado en mi vida.

Consiste en mezclar a partes iguales almidón de maíz y bicarbonato y cuando esté bien mezclado le añades aceite de coco líquido. El aceite de coco es líquido cuando la temperatura ambiental supera los 25 grados celsius. Por debajo de esa temperatura se mantiene sólido. Si es invierno en el momento que haces este remedio sólo tienes que calentarlo a fuego muy lento hasta que en unos segundos se vuelva líquido y ya puedes volcar el aceite sobre la mezcla de bicarbonato y almidón de maíz hasta que logres una pasta fácil de aplicar.

Una vez efectuada la mezcla puedes o aplicar directamente o si lo quieres sólido lo puedes dejar en el frigorífico y aplicártelo cada vez.

Yo lo utilizo para las axilas y para los pies. Es tremendamente efectivo pero tiene un pequeño defecto y es que con el uso continuado del bicarbonato oscurece las axilas así que no lo puedo usar nada más que en momentos muy específicos, cuando necesitas que tu olor no te juegue una mala pasada.

Para estar en casa por ejemplo yo solo utilizo simple y sencillo aceite de coco o aceite de oliva con unas hojas de hierbabuena y con el tiempo tu cuerpo se adapta al nuevo tratamiento y no vuelvas a tener mal olor nunca más… ¡funciona de maravilla!

Todos los remedios de Tisanas de mi Abuela se recogen en este ebook: