Hoy he visto un documental precioso de las hormigas cortadoras de hojas y resulta que tienen un afán tremendo para trepar un árbol, cortar el trozo de una hoja de un tamaño diez veces mayor a su peso con sus diminutas fauces y luego caminan cientos de metros hasta el hormiguero.
Con esas hojas construyen paredes, convirtiendo el hormiguero en un gigante laberinto de túneles y pasadizos en el subsuelo.
Las hojas fermentan y crean hongos que es de lo que se alimentan las hormigas.
Las propias hormigas segregan sustancias para eliminar bacterias y así las paredes de hongos no pueden contaminarse.
Comen lo que necesitan y unas hormigas especializadas se encargan de sacar del hormiguero los deshechos en un basurero que está en una pendiente.
Cuando llueve, el agua cae sobre la pendiente y arrastra esas basuras.
Todas son hembras y hermanas y nacen de una hormiga reina que pone 36.000 huevos diarios y es cuidado por una especie de hormigas más pequeñas que se encargan de mantenerla limpia.
Dicen que las hormigas cortadoras de hojas llevan en la Tierra cientos de miles de años antes que el ser humano y que forman la sociedad más perfecta que existe donde todos los individuos tienen un arduo deseo de cuidar el hormiguero.
Podríamos aprender de ellas para mejorar nuestra sociedad.
Si estudiamos los grandes descubrimientos de nuestra historia, podemos ver que fueron imitaciones de habilidades de otros animales y elementos de la naturaleza
La Madre Tierra desvela sus secretos y si la tratamos con respeto nos abre las puertas del conocimiento, a veces dejando caer una manzana sobre nuestras cabezas.
Si destruimos la Madre Tierra, destruiremos nuestro saber ancestral.
De ahí la importancia de respetar, cuidar, proteger escuchar y amar a la Madre Naturaleza y ella nos compartirá sus secretos.
Ése es el verdadero conocimiento vivo, el que también trato de compartir contigo en mi formación.
Si te fascina tanto como a mí….te espero al otro lado: https://tisanasdemiabuela.com/formacion-continua-de-tisanas-de-mi-abuela